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Vermut Bandarrín 50Cl. es un vermut artesano suave con sensaciones amargantes, elaborado con xarel·lo y macabeo. Presentado en una botella tipo gaseosa.
Un bandarra es una expresión típica catalana para denominar a una persona sin escrúpulos de ninguna clase; un bestia. Después del éxito de El Xitxarel·lo, Martí i Serdà vuelve a la carga con este nuevo vermú desenfadado.
El Bandarra parte de un vino de Macabeo y Xarel·lo de las fincas Martí Serdà del Alt Penedès. Al vino blanc se le hace una larga maceración con más de 50 extractos de hierbas, flores, semillas y especias naturales como la canela, el gengibre, la vainilla, el regaliz, el anís, la manzanilla, romero, laurel, lúpolo, naranja amarga,... Acabada la maceración se finaliza en toneles de roble de 500 litros con las propias soleras.
Nota de cata de Vermut Bandarrín 50Cl.
Vermut Bandarrín es de color caoba con reflejos anaranjados, bastante denso y muy limpio. En aromas predomina el regaliz y los toques cítricos. La entrada en boca es suave y dulce, un buen equilibrio de dulzura y amargura que nos deja un post gusto amable, ligero y persistente.
Vermut Bandarrín 50Cl. es un vermut artesano suave con sensaciones amargantes, elaborado con xarel·lo y macabeo. Presentado en una botella tipo gaseosa.
Un bandarra es una expresión típica catalana para denominar a una persona sin escrúpulos de ninguna clase; un bestia. Después del éxito de El Xitxarel·lo, Martí i Serdà vuelve a la carga con este nuevo vermú desenfadado.
El Bandarra parte de un vino de Macabeo y Xarel·lo de las fincas Martí Serdà del Alt Penedès. Al vino blanc se le hace una larga maceración con más de 50 extractos de hierbas, flores, semillas y especias naturales como la canela, el gengibre, la vainilla, el regaliz, el anís, la manzanilla, romero, laurel, lúpolo, naranja amarga,... Acabada la maceración se finaliza en toneles de roble de 500 litros con las propias soleras.
Nota de cata de Vermut Bandarrín 50Cl.
Vermut Bandarrín es de color caoba con reflejos anaranjados, bastante denso y muy limpio. En aromas predomina el regaliz y los toques cítricos. La entrada en boca es suave y dulce, un buen equilibrio de dulzura y amargura que nos deja un post gusto amable, ligero y persistente.
