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Nyetimber Blanc de Blancs es un vino espumoso de alta calidad producido en Inglaterra con uvas Chardonnay cuidadosamente seleccionadas.
Esta pura expresión de Chardonnay, elaborada a partir de una sola cosecha y con un tiempo prolongado sobre lías, fue el primer estilo producido en Nyetimber y marcó el comienzo de su viaje pionero a principios de la década de 1990.
Este vino se caracteriza por su aroma a cítricos y manzanas, su sabor delicado y equilibrado y su textura cremosa. Nyetimber Blanc de Blancs es perfecto para ocasiones especiales y se ha ganado una reputación como uno de los mejores vinos espumosos de Inglaterra.
Nota de cata de Nyetimber Blanc de Blancs
Tono dorado claro y una mousse fina y delicada.
Los aromas de sorbete de limón y madreselva conducen a notas de pastelería fresca y vainilla.
En boca es redondo y suave, ofreciendo notas generosas pero elegantes de manzana verde, ralladura de limón, azahar y manzanilla, con un toque de avellana horneada. Una mineralidad sutil acentúa la acidez fresca y crujiente, lo que lleva a un final largo y complejo.
Nyetimber Blanc de Blancs es un vino espumoso de alta calidad producido en Inglaterra con uvas Chardonnay cuidadosamente seleccionadas.
Esta pura expresión de Chardonnay, elaborada a partir de una sola cosecha y con un tiempo prolongado sobre lías, fue el primer estilo producido en Nyetimber y marcó el comienzo de su viaje pionero a principios de la década de 1990.
Este vino se caracteriza por su aroma a cítricos y manzanas, su sabor delicado y equilibrado y su textura cremosa. Nyetimber Blanc de Blancs es perfecto para ocasiones especiales y se ha ganado una reputación como uno de los mejores vinos espumosos de Inglaterra.
Nota de cata de Nyetimber Blanc de Blancs
Tono dorado claro y una mousse fina y delicada.
Los aromas de sorbete de limón y madreselva conducen a notas de pastelería fresca y vainilla.
En boca es redondo y suave, ofreciendo notas generosas pero elegantes de manzana verde, ralladura de limón, azahar y manzanilla, con un toque de avellana horneada. Una mineralidad sutil acentúa la acidez fresca y crujiente, lo que lleva a un final largo y complejo.
