El Silver Brut Nature se podría comparar con la sensación de deslizarse sobre la nieve polvo, seca, fresca, pura y ligera. Al mojarnos los labios, la delicada espuma comienza a cubrir nuestra boca, la lengua surfea en una fina efervescencia mientras una avalancha de sabor golpea nuestras papilas gustativas.
Se trata de un espumoso elaborado con uvas de pinot noir vendimiadas tardíamente para que proporcionen el equilibrio perfecto. La no adición de azúcares permite que el carácter del suelo de tiza y arcilla se traslade con nitidez hasta las copas y el 35% de vino reserva explica su complejidad. Si nos fijamos, a modo de ejemplo, en el lote embotellado en la primavera de 2015, el 65% del vino base fue de la añada 2014, el 10% de 2013, el 20% de 2012 y el 5% de 2010.
Después de 48 meses con sus lías, las botellas se degüellan a medida, después de una cuidadosa evaluación de cada lote. Se realiza el degüelle y la dosificación, según el vino, sus atributos específicos, evolución, estación del año y destino final, garantizando así una experiencia sensorial perfecta en cada botella de André Clouet Silver Brut Nature. El embotellado se realiza sin adición alguna de azúcar y con una cápsula permeable que permite un ligero intercambio de oxígeno para crear la evolución deseada del vino.
Tras todas estas atenciones encontraremos un vino espumoso que es verdadera esencia natural de la uva pinot noir. Su nariz es rica y tostada, con marcados recuerdos a frutos secos, piel de naranja, manzana asada y galleta. Su medida burbuja deja sentir con elegancia el paso del tiempo a medida que el vino evoluciona en la copa. La boca es estructurada, compleja y equilibrada, seca y de gran profundidad. Su buena acidez y ligero amargor lo convierten, junto a su gran longitud, en un Champagne versátil a tener muy en cuenta en cualquier situación.