En el año 1984 salió al mercado el primer bourbon de barrica única del mundo, con la etiqueta "Blanton's Single Barrel Bourbon". Fue nombrado de este modo en honor al Coronel Albert B. Blanton, convirtiéndose en el mejor de los homenajes para un hombre que dedicó su vida a la preservación de la tradición del bourbon artesanal.
El Coronel Blanton, dedicó su carrera a la producción de whisky fino. Empezó como chico de los recados y llegó a ser presidente de la planta de whisky. Durante más de 55 años se encargó de sacar adelante la que hoy es la Destilería Buffalo Trace durante los tiempos más difíciles del siglo XX. La destilería siguió operativa durante la ley seca de EUA con un permiso gubernamental especial, sobrevivió la Depresión y la Gran Inundación de 1937 del río Kentucky e incluso consiguió que siguiera funcionando durante la Segunda Guerra Mundial.
Destacan aromas a especias de cítricos secos y pieles de naranja con un ligero toque a caramelo y vainilla.
Entrada suave y completo, marcada por una mezcla de azúcar quemado, caramelo, naranja y clavo. El final es apagado pero bien equilibrado con vainilla, miel y cítricos.